Las secuelas de un accidente de coche pueden ser estresantes o incluso borrosas, y muchas personas no se dan cuenta de sus lesiones hasta días u horas después del suceso. A medida que la adrenalina empieza a disiparse y tu cuerpo intenta reanudar su funcionamiento normal, puedes empezar a notar dolores y problemas con diversos tipos de movilidad. Aunque te evaluaran en el lugar de los hechos, el latigazo cervical no aparece en las exploraciones, y puede que no sepas que te ha afectado hasta que visites a un médico especialista en latigazos cervicales. Si empiezas a experimentar síntomas retardados tras un accidente de coche, a continuación te indicamos algunos signos comunes de latigazo cervical a los que debes prestar atención.
1. Dolor de cuello
Según la gravedad de la lesión, el dolor de cuello puede ir de leve a intenso. En algunos casos, se localizará en una zona concreta, pero también puede ser un dolor generalizado o que se irradia por el hombro hacia el brazo o la mano. El latigazo cervical se produce cuando los ligamentos y músculos del cuello se tuercen o incluso se desgarran, provocando este dolor. También pueden causar un dolor similar las lesiones de discos, articulaciones, nervios o huesos, pero si te has visto implicado en una colisión, el latigazo cervical es la lesión más frecuente en los accidentes de coche.
2. Dolor de hombro o espalda
Cuando se lesionan los tejidos blandos del cuello, como músculos o ligamentos, el dolor puede transferirse a otros tejidos blandos de la zona. Cuando esto ocurre en el latigazo cervical, el hombro y la parte superior de la espalda también pueden sufrir dolor como consecuencia de la lesión.
3. Reducción de la amplitud de movimiento
El dolor suele hacer que no quieras mover esa parte del cuerpo, pero una reducción de la amplitud de movimiento puede ser más grave. Puedes tener una incapacidad real para moverte de formas que normalmente puedes. Cuando un músculo está tenso o dañado, puede impedir determinadas acciones. Un ligamento roto, como en el latigazo cervical, puede hacer lo mismo. Es recomendable que mantengas el cuello y los brazos móviles con el latigazo cervical para recuperar el movimiento y mantenerlo activo. La falta de estabilidad o la dificultad para controlar el cuello también pueden ser signos de latigazo cervical.
4. Dolores de cabeza
Cuando el cuello está dañado, puede estar relacionado con la columna cervical y provocar dolores de cabeza. Las lesiones nerviosas y articulares pueden causarlo, así como la tensión del latigazo cervical. Aunque no te hayas lesionado la cabeza, puedes sentir cefaleas tensionales y dolor como consecuencia de las lesiones por latigazo cervical.
5. Hormigueo, debilidad o entumecimiento
En algunos casos, el latigazo cervical puede causar compresión o inflamación de una raíz nerviosa espinal en el cuello, lo que puede provocar síntomas como hormigueo, sensación de “pinchazos” o entumecimiento desde el hombro hasta el brazo y las manos. Esto suele ocurrir en un solo lado del cuerpo. Esto puede ser un indicio de un daño más grave.
¿Tengo un riesgo elevado de sufrir un latigazo cervical?
Técnicamente, cualquier persona que viaje en coche es vulnerable al latigazo cervical, ya que no hay forma de evitar totalmente que se produzca. Sin embargo, hay algunos factores de riesgo que pueden hacer que el riesgo asociado al latigazo cervical sea mayor. Por ejemplo, ser golpeado por detrás o “embestido por detrás” por otro coche es el tipo de accidente que tiene más probabilidades de causar un latigazo cervical. Estar en un vehículo parado durante el impacto también puede ser un factor de riesgo habitual. A menudo, la persona que no tiene la culpa del accidente es la que tiene más probabilidades de sufrir un latigazo cervical.
Las mujeres y los adultos jóvenes también son más propensos a sufrir un latigazo cervical. Los antecedentes de dolor cervical también pueden causar síntomas más graves, así como las personas que tienen trabajos de “escritorio” y miran hacia abajo en posición sedentaria todo el día, ya que pueden tener los músculos tensos.
Tratamiento del latigazo cervical
Si crees que puedes estar sufriendo un latigazo cervical, es importante que visites a un médico para que te haga un examen físico. En esta cita, es posible que te hagan exploraciones diagnósticas como una resonancia magnética o una tomografía computarizada, aunque en la mayoría de los casos el latigazo cervical no aparece en estas exploraciones. La revisión de tus síntomas será la principal forma de diagnosticar la afección. A partir de ahí, te recetarán antiinflamatorios o relajantes musculares, y te dirán que apliques calor en la zona, así como una cadena de ejercicios para ayudarte a recuperar el movimiento.
En Ortopedia AICA, nuestros médicos especialistas en cuello y nuestro equipo están especializados en el tratamiento de lesiones derivadas de accidentes de tráfico. Podemos proporcionar una evaluación precisa de tu lesión y su gravedad, y crear un plan de tratamiento personalizado para tu situación. Si experimentas alguno de los síntomas mencionados, ponte en contacto con nosotros hoy mismo para iniciar el proceso de recuperación.