¿Cómo funciona la resonancia magnética en los accidentes de tráfico?
La resonancia magnética utiliza potentes imanes y ondas de radio para crear imágenes detalladas del interior de tu cuerpo. El proceso consiste en permanecer inmóvil dentro de una máquina grande y cilíndrica. A diferencia de las radiografías, que utilizan radiación, las resonancias magnéticas son una alternativa más segura para obtener imágenes detalladas. Esto es lo que puedes esperar durante una resonancia magnética en AICA:
- Preparación: Se te pedirá que te quites cualquier objeto metálico y que te pongas una bata. Nuestro personal te guiará durante el proceso de preparación para garantizar tu comodidad y seguridad.
- La exploración: Te tumbarás en una camilla que se desliza dentro de la máquina de resonancia magnética. La máquina es ruidosa, pero te proporcionarán tapones para los oídos o auriculares para que te relajes. La exploración en sí es indolora y suele durar entre 30 y 60 minutos.
- Después del Escaneado: Una vez finalizada la exploración, puedes reanudar tus actividades normales. Nuestros radiólogos analizarán las imágenes y compartirán los resultados con tu médico para elaborar un plan de tratamiento integral.
La tecnología de resonancia magnética proporciona una imagen clara y precisa de tus lesiones internas, lo que la convierte en una herramienta vital en el proceso de diagnóstico y tratamiento tras un accidente de coche.
¿Cuándo debes hacerte una resonancia magnética tras un accidente de coche?
El momento oportuno es clave cuando se trata de diagnosticar lesiones tras un accidente de coche. Es aconsejable hacerse una resonancia magnética lo antes posible si experimentas alguno de los síntomas siguientes:
- Dolor persistente que no mejora con reposo o medicación
- Sensación de entumecimiento u hormigueo en las extremidades
- Dolores de cabeza o mareos inexplicables
- Dificultad para moverse o realizar actividades cotidianas
La obtención precoz de imágenes puede identificar problemas antes de que se agraven, garantizando que recibas el tratamiento adecuado con prontitud. Retrasar una resonancia magnética puede dar lugar a lesiones no diagnosticadas que podrían empeorar con el tiempo, provocando dolor crónico y otros problemas de salud a largo plazo.