Para las personas que luchan contra el dolor de ciática, a veces puede que te encuentres buscando una solución rápida para aliviar las molestias en ese momento e intentas reventarte la espalda. Puede que sientas un poco de alivio inicial, pero antes de que te des cuenta el dolor ha vuelto igual que antes. Los quiroprácticos y los médicos ortopédicos no recomiendan reventarse la espalda, porque se corre el riesgo de forzar o tirar de los músculos de la zona y provocar más dolor. Cuando recibas tratamiento para la ciática, tu quiropráctico puede utilizar ajustes suaves que pueden tener un efecto más duradero que reventarte la espalda, y con muchos menos riesgos.
¿Qué causa la ciática?
La ciática es el dolor lumbar que se experimenta cuando el nervio ciático está pinzado o comprimido, lo que provoca un dolor punzante desde la parte baja de la espalda hasta una o ambas piernas. Hay varias formas de que el nervio ciático se pince y provoque estos síntomas de dolor.
Hernia discal
Los discos que separan cada una de las vértebras de tu columna están hechos de un material esponjoso que ayuda a amortiguar las vértebras, absorber los golpes y evitar que los huesos rocen entre sí. Una hernia discal, a veces denominada “hernia discal”, se produce cuando uno de estos discos se desplaza. Esto puede provocar dolor, ya que las vértebras dejan de estar debidamente amortiguadas. El dolor ciático puede estar causado específicamente por una hernia discal, cuando el tejido blando y el líquido que componen el disco acaban presionando el nervio ciático.
Enfermedad discal degenerativa
Con el tiempo, el desgaste natural del cuerpo y la columna vertebral puede provocar en algunas personas la enfermedad degenerativa discal. Esta enfermedad se produce cuando los discos vertebrales que separan las vértebras empiezan a debilitarse, secarse e incluso desplazarse de su sitio. Cuando estos discos empiezan a degenerarse con el proceso natural de envejecimiento, puede ser frecuente que un disco de la zona lumbar provoque el pinzamiento del nervio ciático.
Estenosis espinal
Hay varias razones por las que alguien puede desarrollar estenosis espinal, que es una afección en la que el canal espinal empieza a estrecharse. La columna vertebral alberga y protege el sistema nervioso, por lo que si empieza a estrecharse puede ejercer presión sobre los nervios, incluido el nervio ciático. La estenosis espinal es más frecuente en el cuello y la zona lumbar, por lo que es aún más probable que cause dolor ciático.
Otras causas
La ciática también puede estar causada por otras afecciones, como una lesión en la zona lumbar o en la zona próxima al nervio ciático. El embarazo también puede causar ciática, ya que el cuerpo se estira y se ajusta para prepararse para el nacimiento de un hijo. Otras causas menos frecuentes, pero no menos graves, son el tejido cicatricial, los tumores y las infecciones.
Tratamientos quiroprácticos para la ciática
La atención quiropráctica ofrece un enfoque natural pero eficaz para el tratamiento de la ciática. Los quiroprácticos utilizan técnicas no invasivas y no recetan medicamentos.
Ajustes Quiroprácticos
Los ajustes quiroprácticos son manipulaciones suaves de la columna vertebral y de los músculos y tejidos blandos que la sostienen. El objetivo de la atención quiropráctica es utilizar ajustes y otras técnicas quiroprácticas para favorecer que la columna vuelva a su alineación correcta. Los ajustes pueden proporcionar un alivio más duradero que los golpes en la espalda realizados en casa, y ayudan a aliviar la presión sobre el nervio ciático.
Masaje Quiropráctico
Tu quiropráctico también puede utilizar técnicas de terapia de masaje quiropráctico para ayudar a que tus músculos se relajen y tu cuerpo libere unos analgésicos naturales llamados endorfinas. El masaje quiropráctico va un paso más allá que un masaje tipo balneario, porque se dirige a músculos y tejidos blandos concretos que pueden afectar directamente a tu nervio ciático.
Técnicas caseras seguras para la ciática
Además de la atención quiropráctica, tu plan de tratamiento de la ciática también puede incluir una combinación de técnicas seguras y caseras que puedes practicar para aliviar el dolor. Es probable que tu médico te recomiende una combinación de prácticas y soluciones de autocuidado para aliviar la ciática. Alternar compresas frías y calientes en la zona lumbar puede aliviarte, ya que el calor ayuda a relajar los músculos, mientras que el frío puede aliviar la inflamación. Tu médico también puede recomendarte ejercicios específicos, incluidos ejercicios quiroprácticos, que pueden ayudar a liberar la presión en los músculos que rodean al nervio ciático sin agravarlo más. Los ejercicios relacionados con el tratamiento de la ciática pueden incluir estiramientos específicos e incluso yoga que pueden hacerse en casa. Tu quiropráctico también puede recomendarte cambios en el estilo de vida, como centrarte en una postura adecuada o en posiciones específicas para dormir, a fin de aliviar el dolor.
Si sufres ciática y quieres saber más sobre cómo puede funcionarte un plan de tratamiento de la ciática, ponte en contacto con el equipo de médicos de AICA Ortopedia para programar una consulta y empezar a experimentar alivio de la ciática.