Beber una cantidad abundante de agua desempeña un papel vital en tu salud más de lo que crees. Al beber la cantidad recomendada de agua, tu sistema inmunitario está mucho más sano y puede combatir enfermedades y prevenir otras lesiones.
Ahora que el calor empieza a acechar, mantenerse hidratado no sólo reducirá el riesgo de deshidratación, sino también la posibilidad de sufrir muchas lesiones ortopédicas comunes.
Deshidratación y lesiones ortopédicas
Al realizar una actividad física con calor, tu cuerpo corre un mayor riesgo de sufrir calambres por calor si no se te hidratas adecuadamente. El cuerpo pierde demasiada agua durante la actividad y, como consecuencia, los músculos se tensan. Cuando esto ocurre, pueden producirse lesiones. Normalmente, cuando se produce este tipo de calambre por falta de agua, son frecuentes las distensiones musculares, los desgarros y las fracturas óseas.
El agotamiento por calor también es un efecto secundario frecuente de la falta de consumo adecuado de agua. La temperatura corporal aumentará, y la persona puede sufrir mareos y fatiga, así como dolores de cabeza. Estos síntomas pueden dificultar la realización de cualquier actividad física en el calor, y por ello puede producirse una lesión ortopédica. Cuando realices cualquier actividad física con calor, hidrátate siempre.
Retos para mantenerse hidratado
Mantenerse hidratado puede ser difícil cuando se está activo, pero debe ser una prioridad. Ten siempre una reserva abundante de agua, aunque la actividad sea de bajo impacto. Al hacer ejercicio, existe la posibilidad de perder hasta 3 litros de agua por hora, por lo que es crucial reponer ese suministro para no deshidratarse. Aunque existen muchas opciones para que los deportistas se mantengan hidratados durante los entrenamientos, la mejor para consumir sigue siendo el agua, ya que no contiene azúcar añadido ni calorías. He aquí algunos consejos útiles de médicos ortopédicos para mantenerte hidratado mientras haces ejercicio y disminuir el riesgo de lesiones relacionadas con la deshidratación.
Mantenerse hidratado
Si estás sometido a temperaturas elevadas, consume 20 onzas de agua 2 horas antes de iniciar cualquier actividad física al aire libre para evitar la deshidratación y las lesiones ortopédicas. Mientras haces ejercicio, sigue bebiendo 10 onzas cada 20 minutos para evitar la deshidratación. Si te sientes un poco mareado o aturdido, es muy probable que no estés bebiendo lo suficiente, y que tengas que mejorar tu forma de beber.
Incluso después de dejar de hacer ejercicio, sigue bebiendo. Consume unas 8 onzas después del entrenamiento para evitar los calambres. Escucha siempre a tu cuerpo. Si necesitas un descanso, tómatelo. Si sientes que necesitas más agua, bebe un poco. Si estás mareado o aturdido, siéntate. Ninguna actividad física merece el riesgo de deshidratación o lesión ortopédica por falta de consumo de agua.
Mantenerse a salvo
Presta siempre atención a tu cuerpo y sé consciente de lo que te dice. Una lesión ortopédica puede ser dolorosa y dificultar tu vida cotidiana en general durante días, semanas o incluso meses. Si tienes que participar en una actividad con calor, asegúrate de que consumes la cantidad de agua recomendada y presta atención a cualquier síntoma que pueda estar asociado al agotamiento por calor/deshidratación.
Si has sufrido una lesión ortopédica o deportiva o quieres saber más sobre cómo mantenerte seguro mientras haces ejercicio en el calor, ponte en contacto con nuestros médicos ortopédicos de Atlanta al (404) 855-2141 para una consulta.
