El dolor de espalda es una de las razones más comunes por las que millones de personas visitan al médico cada año. Puede que hayas oído la expresión “me he tirado la espalda” y te hayas preguntado qué significa exactamente. En realidad, “tirarse de espaldas” se refiere a un caso repentino en el que experimentas inmediatamente dolor lumbar. Tirarse de espaldas puede causar un dolor tan fuerte que puedes preguntarte si deberías ir al médico de inmediato. Cuando te duele la espalda, puede impedirte realizar movimientos cotidianos sencillos, como pasar de estar sentado a estar de pie sin sentir un dolor importante. Esto es lo que debes saber sobre lo que ocurre cuando te echas la espalda.
Síntomas de echar la espalda
La primera e inmediata respuesta de tu cuerpo al echarte hacia atrás suele ser un fuerte dolor en la parte baja de la espalda. También puede ir acompañado de espasmos musculares, en los que los músculos de la espalda que normalmente ayudan a sostener y estabilizar la columna se tensan y se contraen. Si crees que has expulsado la espalda, puedes empezar a sentir que la espalda está rígida y que los giros o estiramientos sencillos te dejan dolorido e incluso pueden aumentar el dolor.
Cómo puedes echarte a la espalda
Las formas más comunes en que la gente se ha tirado de espaldas incluyen movimientos tras una larga y dura jornada de trabajo o movimientos bruscos que sorprenden y agravan la espalda.
Elevación
Puede que hayas oído a alguien decir que se destrozó la espalda al hacer una mudanza e intentar levantar muebles pesados. Levantar algo pesado sin una postura adecuada puede ejercer demasiada presión sobre la parte baja de la espalda y dañar los músculos lumbares.
Torsión
Un movimiento brusco de torsión también puede hacer que te tuerzas la espalda. Si, por ejemplo, no calientas bien los músculos y te estiras antes de practicar un deporte, corres el riesgo de dañarte la espalda. El movimiento de torsión que hace tu cuerpo para mover un palo de golf o una raqueta de tenis puede hacerte perder la espalda.
Mala postura
Una mala postura puede provocar el debilitamiento de los músculos y ligamentos que ayudan a sostener la columna vertebral. A medida que estos tejidos blandos se debilitan, son más susceptibles de sufrir lesiones como desgarros musculares o lesiones medulares. Una mala postura al realizar tareas físicas como levantar objetos pesados o practicar un deporte también puede hacer que te tuerzas la espalda.
Diagnóstico del dolor lumbar
A menudo, las personas pueden identificar la actividad o el movimiento que les provocó el dolor repentino de espalda. Cuando visites a tu médico ortopédico, querrá conocer tus síntomas, como cuándo los notaste por primera vez y qué hace que esos síntomas mejoren o empeoren. También es posible que el médico quiera hacerte una prueba de diagnóstico por imagen, como una radiografía o un TAC de la zona lumbar, para determinar si has expulsado la espalda. El dolor, el hormigueo y el entumecimiento también pueden deberse a problemas con los nervios que recorren tu columna vertebral, por lo que es posible que tu médico también quiera realizar pruebas adicionales para descartar otros posibles problemas o lesiones.
Opciones de tratamiento tras tirarte de espaldas
Lo mejor que puedes hacer inmediatamente después de lesionarte la espalda es descansar. Una lesión de espalda puede causar inflamación en la zona, y una de las formas mejores y más naturales de ayudar a disminuir la hinchazón y la inflamación es descansar y evitar actividades que sometan a tu cuerpo a demasiada tensión. También puedes probar a aplicarte una bolsa de hielo o una compresa fría en la zona lumbar para aliviar la inflamación de la zona. Una compresa caliente o una almohadilla térmica también pueden ayudar a relajar los músculos y aliviar la rigidez de la espalda. Puede que tengas que ajustar tu forma de sentarte y dormir, por ejemplo, apoyándote en almohadas para tener un mejor soporte. Las almohadas y los soportes especiales pueden ayudar a aliviar la presión sobre la espalda dolorida mientras se cura.
En caso de lumbalgia grave, visita a un médico ortopédico para saber más sobre tus opciones de tratamiento. Ortopedia AICA cuenta con un equipo de médicos de múltiples especialidades, entre ellos médicos ortopédicos, quiroprácticos, neurólogos y fisioterapeutas que pueden ayudarte después de haberte tirado la espalda. Visítanos online para encontrar un centro cerca de ti y empieza hoy mismo a experimentar un alivio duradero del dolor con uno de nuestros médicos altamente cualificados y expertos.