Mantener unas rodillas funcionales y sanas es imprescindible para garantizar tu bienestar a largo plazo. Cuando te empiezan a doler las rodillas, realizar actividades básicas como caminar o subir escaleras se convierte en algo difícil o imposible de hacer. Para quienes disfrutan haciendo ejercicio, el dolor de rodillas puede impedirte realizar cualquier tipo de actividad física, ya sea correr o levantar pesas.
Prevenir el dolor de rodilla
Afortunadamente, puedes prevenir el dolor de rodilla siguiendo las siguientes recomendaciones de nuestros médicos ortopédicos de Atlanta.
Mantén el peso corporal ideal
Caminar sobre una superficie plana y dura como el pavimento añade a tus rodillas una vez y media tu peso corporal. Esto significa que si pesas cerca de 150 libras, tus rodillas se ven obligadas a manejar aproximadamente 225 libras con cada paso. Cuando caminas cuesta arriba o escaleras arriba, esta fuerza aumenta exponencialmente.
Para las personas obesas o con sobrepeso, perder peso debe ser una de las principales prioridades, teniendo en cuenta los posibles efectos a largo plazo sobre la salud. Para ello, considera la posibilidad de reducir la cantidad que consumes en cada comida, intenta seleccionar opciones más sanas, como verduras ecológicas, y haz ejercicio con regularidad.
Si tienes más de 15 kilos de sobrepeso, el tipo de ejercicio que realices es fundamental. Considera el ciclismo, el entrenamiento elíptico o las actividades acuáticas, que son excelentes para quemar calorías sin exponer las rodillas a una presión adicional.
Tren cruzado
Es importante dar a tus rodillas un descanso del estrés de vez en cuando. En lugar de realizar constantemente ejercicios de alto impacto, considera la posibilidad de alternar tus días de carrera con entrenamientos alternativos como el levantamiento de pesas. En una semana ideal, querrás alternar cada dos días ejercicios de cardio y levantamiento de pesas.
Si mantienes una rutina de ejercicios en la que realices un entrenamiento cruzado, podrás evitar que determinados músculos se desarrollen en exceso a expensas de otros. Cuando se producen desequilibrios musculares, tus rodillas se vuelven vulnerables a la disfunción y a otras afecciones potenciales.
Elige un calzado adecuado
El tipo de calzado que utilizas marca una diferencia significativa en el funcionamiento de tu cuerpo. Asegúrate de que llevas un calzado adecuado a tu forma de andar. Intenta cambiarlos cada 800 km aproximadamente o antes de que se desgasten. Además, elige un calzado concreto que se adapte al tipo de actividad que realizas. Por ejemplo, las zapatillas de baloncesto no proporcionan el mismo tipo de amortiguación que las zapatillas de correr. Puede que necesites comprar varias zapatillas que se adapten a los tipos de actividades que realizas para evitar el dolor de rodilla.
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Si te interesa saber cómo puedes perder peso evitando el dolor de rodilla, ponte en contacto con nuestra consulta de inmediato para hablar con uno de nuestros especialistas en salud. Marca el (404) 855-2141 para hablar con uno de nuestros amables empleados y concertar una cita.