Una lesión cerebral traumática, o LCT, se produce cuando algo fractura el cráneo, penetra en él o lesiona el tejido cerebral. Las LCT suelen ser el resultado de un golpe violento en la cabeza o una sacudida de la cabeza o el cuerpo. Aproximadamente la mitad de las LCT están causadas por accidentes de coche, y aunque algunas son temporales, otras son muy graves y pueden acarrear problemas a largo plazo. Si te diagnostican una lesión cerebral traumática o sospechas que la tienes, es muy importante que acudas a un neurólogo de Atlanta con experiencia y conocimientos. Una lesión cerebral puede requerir un tratamiento agresivo y necesitas un especialista de calidad que te ayude a superar los retos de una LCT tras un accidente.
¿Qué causa las lesiones cerebrales traumáticas?
Las LCT pueden formar parte de las lesiones por accidente de coche de dos formas distintas. Una ocurre cuando te golpeas la cabeza contra algo, como el volante, la ventanilla, el reposacabezas o el parabrisas. Esto se considera un traumatismo contuso y es un tipo más grave de lesión craneal. Este tipo de traumatismo craneoencefálico puede o no causar una herida abierta, y un objeto puede o no penetrar en el cráneo o en el tejido cerebral. Si algo penetra en el cráneo o en el propio cerebro, los efectos a largo plazo serán mucho más graves. La segunda forma en que puede producirse un traumatismo craneoencefálico en un accidente de coche es cuando la fuerza del accidente hace que el cerebro se desplace dentro de la cabeza y golpee el interior del cráneo. Este tipo de lesión cerebral traumática no será evidente en el exterior, pero puede causar hematomas cerebrales (contusiones) o hemorragias cerebrales (hemorragias). Un neurólogo de Atlanta podrá determinar mejor la causa primaria de la LCT y su gravedad, así que asegúrate de visitar a un especialista en cuanto sospeches o notes síntomas de una lesión cerebral traumática.
¿Cuáles son los síntomas de una LCT?
Los síntomas de una LCT pueden ser leves o graves, físicos o psicológicos. Algunos síntomas aparecen inmediatamente después de la lesión, mientras que otros pueden tardar días o incluso semanas en manifestarse. Los síntomas físicos primarios incluyen pérdida de conciencia, confusión, dolor de cabeza, náuseas o vómitos, somnolencia y fatiga, dificultad para dormir o dormir mucho más de lo habitual, problemas del habla, mareos y pérdida de equilibrio o coordinación. Algunas personas pueden experimentar síntomas sensoriales, como sensibilidad a la luz y al sonido, un sabor extraño en la boca, cambios en el sentido del olfato, visión borrosa o zumbidos en los oídos. Los síntomas cognitivos suelen ser un indicador de una lesión cerebral traumática más grave, pero algunas personas con TCE leve también pueden experimentar problemas cognitivos, como problemas de concentración, problemas de memoria, cambios de humor, sentimientos de depresión, ansiedad, agitación y combatividad, dificultad para hablar y trastornos de la conciencia.
LCT leve frente a grave
Las lesiones cerebrales traumáticas leves pueden provocar problemas a corto plazo que mejorarán con el tiempo, a medida que el cerebro se cure. Las LCT graves, sin embargo, requerirán citas recurrentes con un neurólogo de Atlanta para controlar los cambios en los síntomas, explorar opciones de tratamiento y ayudar a una curación adecuada. Independientemente de lo leve o grave que creas que es una LCT, siempre es mejor acudir a un profesional, ya que los traumatismos craneoencefálicos requieren atención médica inmediata y su evolución debe ser supervisada por un neurólogo experimentado de Atlanta. Cuanto más grave sea la LCT, más probable será que la persona sufra complicaciones y problemas a largo plazo a causa de la lesión.
Problemas asociados a las LCT
Las lesiones leves rara vez provocarán cambios intelectuales a largo plazo, problemas de comunicación, cambios de comportamiento, cambios emocionales o problemas sensoriales, pero las LCT graves pueden provocar algunas de estas cosas o todas. Algunas personas experimentarán una serie de complicaciones físicas debidas a las lesiones, como convulsiones, hidrocefalia (acumulación de líquido en el cerebro), infecciones alrededor del cerebro, daños en los vasos sanguíneos, dolores de cabeza y vértigo. En las situaciones más graves, las complicaciones pueden incluir también estados de alteración de la consciencia, como coma, estado vegetativo, estado de consciencia mínima o muerte cerebral. Un neurólogo de Atlanta puede evaluar la gravedad y ofrecer asesoramiento sobre el pronóstico y los planes de tratamiento de una lesión cerebral traumática. Con determinados tipos de cuidados, pueden reducirse las complicaciones y algunas personas con TCE pueden tener más posibilidades de llevar una vida normal sin efectos a largo plazo.
Confía en AICA Ortopedia para el cuidado de la LCT
Si tú o un ser querido habéis sufrido un traumatismo craneal durante un accidente de coche, es importante que busquéis atención médica de inmediato. Los traumatismos craneoencefálicos no son algo que deba tomarse a la ligera, y tu neurólogo de Atlanta puede encaminarte hacia la mejor curación. En AICA Orthopedics, nuestro equipo de neurólogos, quiroprácticos, traumatólogos y demás profesionales trabajarán juntos para proporcionarte una atención integral de calidad que te permita obtener el mejor resultado de tu lesión.