La rotura de menisco es una de las lesiones más frecuentes tratadas en Ortopedia AICA, debido a la gran presión y tensión a la que se ven sometidas tus rodillas a diario. Para quienes se han dañado o desgarrado el menisco, poder aplicar peso sobre la zona afectada resulta difícil o imposible de realizar.
Suelen ser el resultado de un movimiento brusco de torsión mientras un pie permanece en posición de bloqueo y la rodilla de la pierna opuesta está flexionada. También son frecuentes entre quienes manipulan y recogen objetos grandes durante el trabajo, así como entre quienes compiten en deportes como el fútbol. Afortunadamente, existen diversas opciones de tratamiento viables y no invasivas para la rotura de menisco. Si te lesionas la rodilla y te interesa saber cómo nuestros médicos ortopédicos de Atlanta pueden ayudarte, ponte en contacto con nuestra consulta hoy mismo para concertar una cita.
También puedes tener en cuenta la siguiente información, que destaca otros aspectos importantes de una rotura de menisco y cómo aborda el tratamiento nuestro equipo.
Síntomas de la rotura de menisco
Para quienes sufren un desgarro menor, sus síntomas probablemente se limitarán a un ligero dolor y algo de inflamación. La mayoría de los desgarros menores se recuperan al cabo de unas semanas.
Los desgarros moderados provocan un dolor importante que aparece a ambos lados de la rodilla afectada. La inflamación suele existir y desarrollarse a lo largo de dos o tres días, dificultando la flexión de la rodilla. Los síntomas tienden a remitir una vez transcurridas una o dos semanas, aunque el dolor puede volver a aparecer tras una actividad física intensa o prolongada.
Los pacientes que sufren una lesión grave, pueden experimentar sensaciones de chasquido en la rodilla dañada. La rodilla también puede bloquearse, imposibilitando que se doble o camine correctamente. Si el paciente intenta andar, probablemente se sentirá inestable y su rodilla dañada puede ceder repentinamente.
Diagnóstico de una rotura de menisco
Para elaborar un diagnóstico, tu médico ortopédico te hará una serie de preguntas sobre tu historial médico y los tipos de actividades que realizabas cuando notaste por primera vez dolor de rodilla. A continuación, realizará una exploración completa para determinar si la rotura de menisco es el origen de tus síntomas. Para ello, revisarán cada rodilla, examinarán el grado de sensibilidad, comprobarán tu amplitud de movimiento y pueden utilizar un aparato de diagnóstico por imagen para medir la profundidad del daño.
Tratamiento ortopédico
El tratamiento varía en función de una serie de factores, como el alcance del desgarro, la localización, la edad y el grado de actividad. En general, el reposo, la termoterapia y la fisioterapia son útiles para aliviar los síntomas. La fisioterapia es increíblemente útil para reforzar la rodilla lesionada y ayudar a los pacientes a volver a su rutina sin tener que recurrir a procedimientos invasivos.
Si te has lesionado en un accidente y te duele la rodilla, ponte en contacto con nuestra consulta de inmediato para recibir tratamiento. Sólo tienes que marcar (404) 855-2141.