Un nervio pinzado puede causar una serie de síntomas y dolores que pueden ser leves o intensos; si alguna vez has sufrido uno, probablemente habrás estado ansioso por encontrar alivio. Algunas personas no creen que un quiropráctico sea eficaz en este caso, ya que se ocupan de la columna vertebral y no de los nervios. Te sorprenderá saber que los quiroprácticos están muy preparados para tratar los nervios pinzados y lesiones similares por accidente de coche. Sigue leyendo para saber más sobre los nervios pinzados y por qué los quiroprácticos pueden ser los mejores profesionales para tratarlos.
¿Qué es un pinzamiento nervioso?
Los nervios son la forma que tiene el cuerpo de enviar señales a todo el organismo. Cuando la orden motora sale del cerebro, viaja por la médula espinal y a través del nervio hasta llegar a su destino. A continuación, las órdenes sensoriales viajan desde el exterior del cuerpo, suben por la médula espinal y vuelven al cerebro para ser procesadas. Si estos nervios no funcionan correctamente, la comunicación se interrumpe.
Una forma habitual de que se interrumpan los nervios es que los pellizque otra parte del cuerpo. Los signos de un nervio pinzado pueden ser:
- Disminución de la sensibilidad en una zona del cuerpo
- Sensación de entumecimiento, alfileres, agujas y hormigueo
- Dolor agudo y ardiente
- Sensaciones punzantes, parecidas a un shock
- La sensación de que un miembro “se ha dormido”
- Debilidad muscular asimétrica en un lado del cuerpo
Causas de los nervios pinzados
Los pinzamientos nerviosos se producen cuando el propio nervio es comprimido por el tejido circundante, como cartílago, hueso o tejido blando inflamado. Esto puede ocurrir por diversas razones, algunas de las más comunes son:
- Cuestiones relacionadas con el peso y la obesidad
- Artritis reumatoide
- Lesiones traumáticas por deportes o accidentes de coche
- Estrés debido a una mala ergonomía laboral
- Lesiones por sobrecarga debidas al atletismo u otras aficiones
- Roturas y hernias discales
Liberar los nervios pinzados
La mayoría de los nervios pinzados pueden deberse a un problema relacionado con una mala alineación de la columna vertebral y los tejidos del cuerpo. Esto puede incluir huesos, tendones, ligamentos, cartílagos y tejido muscular, que no deben comprimir los nervios y deben realinearse si lo hacen.
Un quiropráctico se centrará en realinear los tejidos del cuerpo para liberar el nervio, liberándolo de donde pueda estar atrapado o comprimido. Utilizando una fuerza controlada, un quiropráctico puede empujar las articulaciones y estructuras de nuevo a su sitio. Así se aborda la raíz del dolor, lo que significa que el alivio puede ser permanente y no temporal. En la mayoría de los casos, estos ajustes manuales bastan para tratar el nervio pinzado sin necesidad de procedimientos invasivos como la cirugía.
En los raros casos en que la atención quiropráctica no puede tratar un nervio pinzado, la cirugía puede ser una opción. La cirugía de descompresión espinal se utiliza para extirpar porciones de hueso u otro tejido que impiden el paso del nervio, con el fin de liberarlo de nuevo. Aunque se trata de una cirugía mínimamente invasiva, sigue siendo más arriesgada que la opción natural de los cuidados quiroprácticos y no suele ser la primera opción de los pacientes ni de los médicos.
Cómo prevenir un pinzamiento nervioso
- Si corres el riesgo de sufrir un pinzamiento nervioso o quieres evitarlo, hay algunas medidas que puedes tomar, entre ellas:
- Mantén una buena postura: no cruces las piernas ni permanezcas tumbado en ninguna posición durante mucho tiempo.
- Incorpora ejercicios de fuerza y flexibilidad a tu programa habitual de ejercicios.
- Limita las actividades repetitivas y, cuando las realices, haz pausas frecuentes.
- Mantén un peso saludable y una rutina de ejercicio.
Qué hacer si tienes un pinzamiento nervioso
Muchos pinzamientos nerviosos son consecuencia de un problema sencillo y se resuelven en pocos días con reposo y cuidados adecuados. Los analgésicos sin receta y la terapia con hielo pueden ser buenas formas de tratar los síntomas en casa.
Sin embargo, si un nervio pinzado dura más de unos días o no responde a las medidas de autocuidado, debes acudir a un quiropráctico. El quiropráctico podrá identificar la causa fundamental del dolor y el punto en el que los nervios han quedado comprometidos, a fin de elaborar un plan para tratar el problema. Aunque el nervio pinzado mejore por sí solo, es posible que no se haya abordado el problema subyacente, lo que puede hacer que reaparezca con el tiempo.
Encuentra un tratamiento ortopédico en Atlanta para los nervios pinzados. Ponte en contacto con Ortopedia AICA hoy mismo para una evaluación exhaustiva. Nuestros quiroprácticos te ayudarán a determinar la causa de tu dolor y a crear un plan para aliviarte. Cuando sea necesario, podemos incluir a otros especialistas como fisioterapeutas, radiólogos e incluso cirujanos ortopédicos en tu plan de cuidados para proporcionarte un tratamiento integral.