Algunas dolencias son fáciles de identificar y diagnosticar: el dolor de espalda o de cuello suele ser fácil de descubrir. Pero a veces experimentamos otros síntomas que no nos damos cuenta de que indican un problema mayor, o que no asociamos con otros síntomas. Por ejemplo, puede que hasta que no visites a un médico especialista en columna vertebral no te des cuenta de que la sensación de frío en los pies puede ser parte de problemas neurológicos mayores. Lo que empieza como un dolor de espalda puede desembocar en algo llamado neuropatía, una afección crónica en la que el dolor se convierte en un proceso patológico. Se calcula que entre el 7 y el 10% de las personas padecen dolor neuropático, pero no mucha gente lo sabe. Es importante buscar asistencia ante cualquier dolor de espalda para saber si puedes pertenecer a este grupo.
¿Qué es la neuropatía?
Todo cuerpo funciona en parte gracias al sistema nervioso periférico, un complejo sistema de mensajes que envían información desde el cerebro y la médula espinal al resto del cuerpo. Los nervios periféricos también envían información al sistema nervioso central sobre las entradas sensoriales. Cuando se dañan los nervios que viven fuera del cerebro y la médula espinal, este sistema de comunicación puede romperse y causar una serie de problemas.
En algunos casos, la neuropatía está causada por problemas metabólicos, exposición a toxinas o afecciones genéticas; la diabetes también es una causa muy frecuente. Cualquier dolor que comprima un nervio puede acabar provocando una neuropatía, y en última instancia es provocada por un traumatismo, como un accidente de coche o de moto. El dolor de espalda suele ser el primer signo de este traumatismo y, por tanto, un buen indicador de que algo podría estar dañado.
Las personas con neuropatía periférica suelen describir el dolor que sienten como sensaciones punzantes, de quemazón u hormigueo. Sin embargo, a medida que la neuropatía persiste, pueden aparecer otros síntomas. Es probable que los primeros signos aparezcan en la espalda y el cuello e irradien a lo largo de las vías nerviosas. También puedes notar decoloraciones de la piel en la zona afectada, así como insomnio o depresión. Todos estos son indicadores de que podría estar desarrollándose una neuropatía y son una razón para buscar atención médica inmediatamente.
Causas de los pies fríos
Cuando la neuropatía se produce por un traumatismo o lesión, la raíz del problema suele estar en la columna vertebral. Una hernia discal es un ejemplo en el que el disco que presiona contra un nervio puede causar un dolor que se convierte en neuropatía. A medida que el dolor se prolonga, el sistema nervioso central puede sufrir cambios permanentes, lo que provoca síntomas en otras zonas del cuerpo.
A medida que se desarrolla la neuropatía, puede afectar primero a los nervios más largos del cuerpo, que llegan hasta los dedos de los pies. Las personas con neuropatía suelen referir entumecimiento u hormigueo en los pies y la parte inferior de las piernas, que algunos describen como similar a la sensación de que se les “duerme” el pie. Para muchos, este hormigueo está ausente, pero persiste la sensación de frío. Los pies también pueden ser sensibles al tacto.
Cuando aparece la neuropatía, los nervios que detectan la temperatura pueden ser algunos de los mensajeros que sufren daños. Cuando estos nervios no funcionan correctamente, las extremidades, como los pies, pueden no ser capaces de regular la temperatura y te parecerán frías, aunque no lo estén al tacto. Esto empezará en los pies, pero a menudo puede extenderse por las piernas y a otras partes del cuerpo.
Tratamiento de la neuropatía
Una de las cosas más importantes que puedes hacer si sospechas una neuropatía es buscar tratamiento precoz. Cualquier lesión de columna o dolor de espalda debe ser evaluada rápidamente por un especialista para que puedas buscar alivio y descartar lesiones que afecten a los nervios. En Ortopedia AICA estamos especializados en la columna vertebral y su efecto en el organismo.
Cuando visites Ortopedia AICA, tendrás acceso a un grupo diverso de especialistas que pueden diagnosticar los problemas que causan dolor de columna. Mediante pruebas de imagen y consultas, podemos trabajar para obtener un diagnóstico y una hoja de ruta para mejorar la salud. Trabajarás con neurólogos, fisioterapeutas, quiroprácticos y neurocirujanos para mejorar la salud de tu columna vertebral.
Aunque siempre es preferible un diagnóstico precoz, Ortopedia AICA tiene experiencia en todos los niveles de gravedad. El daño nervioso seguirá progresando si no se aplica un tratamiento. Ponte en contacto con nosotros hoy mismo para evaluar si puedes estar sufriendo una neuropatía y comenzar tu camino hacia la recuperación.