Las lesiones de espalda y cuello producidas por un accidente de coche pueden afectar significativamente a tu vida cotidiana y tener efectos negativos duraderos en tu salud si no se tratan enseguida. La columna vertebral y el cuello albergan la columna vertebral, que envía comunicaciones a través del resto del cuerpo, y cualquier interrupción de esa comunicación puede causar dolor y molestias importantes. Cuando busques tratamiento de un especialista en columna vertebral tras un accidente de coche, puedes esperar que el médico revise no sólo los huesos de la columna, sino también los tejidos blandos circundantes, como músculos, ligamentos y tendones. Las lesiones musculoesqueléticas de la espalda y el cuello figuran entre las más frecuentes en los accidentes de coche, y es importante tratarlas de inmediato con un profesional médico, como un especialista en columna vertebral.
Lesiones comunes de los tejidos blandos
Los hematomas, las distensiones y los esguinces son lesiones generales comunes de los tejidos blandos y constituyen los tipos más frecuentes de lesiones por accidente de coche que pueden provocar daños en los tejidos blandos. Aunque los hematomas pueden ser los más fáciles de identificar, también pueden indicar que subyace algo más complicado. Además, al igual que los hematomas pueden tardar un tiempo en aparecer, lo mismo puede ocurrir con los síntomas de lesiones en los tejidos blandos, sobre todo tras un accidente de coche. Los síntomas retardados son frecuentes en las lesiones por accidente de coche, porque la adrenalina tras el suceso traumático a veces puede enmascarar el dolor y las molestias de inmediato, por lo que es importante buscar atención médica aunque los síntomas sean leves en ese momento.
Latigazo cervical
El latigazo cervical es una de las lesiones más frecuentes en accidente de coche, debido a cómo afecta la fuerza del impacto al cuello y la columna vertebral. Al impactar con otro vehículo, el cuerpo se ve sacudido hacia delante y luego se va hacia atrás, y aunque el cinturón de seguridad protege el tronco del cuerpo para que no se desplace demasiado hacia delante o hacia atrás, el cuello suele llevarse la peor parte de este tipo de impacto. Cuando la cabeza es sacudida violentamente durante un accidente, puede producirse un latigazo cervical.
El latigazo cervical es un ejemplo clásico de cómo los síntomas pueden retrasarse al principio y cómo el dolor y las molestias pueden aumentar gradualmente en las horas y días posteriores al accidente. La fuerza del movimiento de vaivén no sólo puede ejercer presión sobre la médula espinal, sino también sobre la musculatura circundante y otros tejidos blandos. Esto puede provocar dolor de cuello, rigidez en el cuello y los hombros, e incluso hinchazón en la zona afectada.
Hernia discal
En caso de accidente de coche, tu columna vertebral puede resultar gravemente lesionada por el impacto. Los discos son los tejidos blandos de amortiguación entre las vértebras de la columna vertebral y, en general, ayudan a absorber el impacto de las actividades cotidianas. Sin embargo, en un suceso importante como un accidente de coche, esos discos pueden salirse de su sitio y hacer que las vértebras rocen entre sí o presionen un nervio.
Aunque las hernias disc ales se asocian más comúnmente al desgaste general del cuerpo, una lesión traumática también puede provocar una hernia discal y requerir intervención médica. Tu edad y la cantidad de desgaste general que ya sufren los discos de la columna vertebral también pueden hacerte más susceptible de sufrir una hernia discal en un accidente de coche. Además, las hernias discales también pueden producirse junto con o a causa de una lesión por latigazo cervical.
Distensiones y esguinces
Las distensiones son lesiones del músculo y los tejidos que conectan el músculo con el hueso, mientras que los esguinces son lesiones de los ligamentos que actúan como tejidos conjuntivos entre dos huesos. Tanto los músculos como los ligamentos son tejidos blandos, y aunque la lesión primaria sea en el hueso, también puede dañar los tejidos blandos circundantes, lo que lleva al diagnóstico de distensión o esguince. Los esguinces y distensiones de cuello y espalda no son infrecuentes tras un accidente de coche y deben ser examinados por un especialista en columna vertebral lo antes posible.
Diagnóstico y tratamiento de las lesiones de los tejidos blandos
Cuando sufres una lesión musculoesquelética por un accidente de tráfico, es importante que el médico no sólo evalúe la columna vertebral, sino también los tejidos blandos circundantes para determinar si hay daños. Por eso, los especialistas en columna vertebral suelen recurrir a pruebas de diagnóstico por imagen, como radiografías y resonancias magnéticas, para hacerse una idea más precisa de la zona afectada. Una radiografía proporcionará al médico especialista en columna vertebral una imagen de los huesos y de cómo la lesión puede afectar a la columna vertebral, mientras que una resonancia magnética proporcionará una imagen tridimensional de la zona que incluye los huesos, la musculatura y otros tejidos blandos. Las resonancias magnéticas son muy útiles para proporcionar al especialista en columna vertebral imágenes detalladas de cualquier daño que se haya producido en los tejidos blandos, de modo que pueda elaborar un plan de tratamiento individualizado y prestarte la atención integral que mereces.