Si alguna vez te has roto un hueso o has tenido un accidente de coche, es posible que te hayan hecho una radiografía o un TAC. Se trata de herramientas de diagnóstico por imagen que ayudan al médico a ver mejor cualquier daño en las estructuras internas. Cuando se trata de curarte de una lesión o dolencia, quieres saber si el diagnóstico es correcto. El diagnóstico por imagen ayuda a los médicos a visualizar el daño y a descartar otros posibles problemas o lesiones. Por ejemplo, si has tenido recientemente un accidente de coche y tienes dolor en el cuello y en la parte superior de la espalda, puedes pensar que se trata sólo de músculos doloridos tras un acontecimiento traumático. Los diagnósticos por imagen, como una radiografía, un TAC o una resonancia magnética, pueden proporcionar a tu médico mucha más información y averiguar qué tipo de lesión has sufrido para que puedas recibir el tipo de tratamiento más beneficioso y eficaz.
Lesiones ocultas tras un accidente de tráfico
Las lesiones por accidente de coche pueden ser difíciles de diagnosticar porque los síntomas pueden tardar en aparecer. De hecho, algunas lesiones por accidente de coche suelen denominarse lesiones ocultas, porque aparecen con síntomas retardados. El trauma de sufrir un accidente de coche puede disparar tu adrenalina y puede que incluso estés en estado de shock. Tanto la adrenalina como el shock pueden impedirte reconocer plenamente los síntomas de dolor y la gravedad de las lesiones que hayas podido sufrir. El dolor y otros síntomas pueden tardar horas o incluso días en manifestarse, a medida que desaparece la adrenalina. Por eso siempre debes aceptar cualquier atención médica en el lugar del accidente y también visitar a un médico de accidentes de coche para que te haga un seguimiento lo antes posible. Aunque puede que aún no tengas todos los síntomas de una lesión por accidente de coche, tu médico puede utilizar este tipo de herramientas de diagnóstico por imagen para echar un vistazo al interior y ver si tus huesos, articulaciones, músculos u órganos han sufrido algún daño.
Opciones de diagnóstico por imagen
Existen muchas opciones de diagnóstico por imagen y el tipo de lesión sospechosa puede determinar qué herramienta es la más adecuada. La gravedad de la lesión también puede determinar qué tipo de herramienta de diagnóstico por imagen se debe utilizar en primer lugar. A continuación se exponen tres de las herramientas de diagnóstico por imagen más comunes y cómo ayudan a diagnosticar una amplia variedad de lesiones y afecciones médicas.
Radiografías
Las radiografías son la herramienta de diagnóstico por imagen más común y más familiar para el público en general. Cuando piensas en una radiografía, quizá te imagines las imágenes en blanco y negro que utiliza un médico para diagnosticar un hueso roto. Las radiografías utilizan pequeñas dosis de radiación para proporcionar imágenes de contraste de los huesos y articulaciones del interior del cuerpo. Este tipo de diagnóstico por imagen es muy rápido y eficaz, lo que lo convierte en una opción a la que acudir en casos de urgencia y en situaciones de atención urgente. Tu médico puede pedirte una radiografía si sospecha que tienes un hueso roto, una articulación dislocada o una desalineación de la columna vertebral.
TAC
Los TAC son similares a las radiografías en que también utilizan pequeñas dosis de radiación para el diagnóstico por imagen. Sin embargo, a diferencia de una radiografía, un TAC proporciona una imagen tridimensional de la zona afectada e incluye imágenes de tejidos blandos como músculos, ligamentos y tendones. El TAC también es frecuente en situaciones de urgencia, porque suele durar poco tiempo. Tu médico también puede solicitar un TAC si una radiografía no fue concluyente o no proporcionó suficiente claridad y detalle del daño en tus estructuras internas. El TAC puede utilizarse para confirmar el diagnóstico de lesiones como el latigazo cervical, una hernia discal y una fractura articular.
Resonancias magnéticas
La resonancia magnética es un tipo de diagnóstico por imagen que no utiliza radiación. En su lugar, una máquina de resonancia magnética proporciona a tu médico imágenes detalladas de tus estructuras internas mediante potentes imanes y ondas de radio. Una resonancia magn ética tarda más en completarse que un TAC o una radiografía, aunque proporciona imágenes transversales de las zonas afectadas con el máximo detalle. La resonancia magnética puede utilizarse para detectar tumores, controlar la progresión del cáncer y diagnosticar lesiones cerebrales.
Cómo puede ayudar el diagnóstico por imagen
El diagnóstico por imagen proporciona a tu médico valiosas imágenes de cómo se han visto afectadas tus estructuras internas por una lesión o enfermedad. Para crear un plan de tratamiento informado e individualizado, tu médico querrá utilizar herramientas de diagnóstico por imagen para garantizar el diagnóstico más preciso. Visita uno de nuestros centros de AICA Orthopedics en el área metropolitana de Atlanta para conocer nuestras opciones internas de diagnóstico por imagen y reunirte con uno de nuestros médicos hoy mismo.